Señaló que llegaron con una decisión firme: defender derechos y garantías, pensando no solo en la Santa Fe actual sino en la que vendrá.
Reconoció que la nueva Constitución no es la ideal ni la que soñaban plenamente, pero sí la mejor posible fruto del debate, la escucha activa y la diversidad de miradas.
Resaltó los avances logrados: inclusión de derechos vinculados a salud, educación, discapacidad, cultura, cooperativas, Malvinas y bibliotecas públicas; defensa de empresas estatales y de la Caja de Jubilaciones; incorporación de mecanismos de participación ciudadana y de equilibrios institucionales más firmes, entre otras.
Reivindicó la diversidad y la construcción colectiva como rasgos del proceso y como sello de su bloque. Subrayó que se van “sin reproches”, con la convicción de haber dado todo y de haber trabajado con buena fe y lealtad democrática.
Pidió que esta Constitución sirva como punto de partida, como contrato social que abra la puerta a más participación y confianza ciudadana. Y cerró con un reconocimiento a trabajadores legislativos, a los vecinos que acompañaron y al rol de la educación pública en su propia trayectoria personal